Alberto Cazaña comenzó su andadura como emprendedor en noviembre de 2021, creando un negocio de servicio de entrega a domicilio de la mano del servicio de Capacitación de ASPRONA. Después de 3 años, su proyecto es todo un éxito.

El servicio de Capacitación de ASPRONA promueve la plena inclusión social y laboral de las Personas Con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo (PCDID) a través de procesos personalizados de capacitación y prestación de apoyos.

El emprendimiento con apoyo es uno de los servicios que ASPRONA ofrece a las PCDID y es una modalidad de inclusión laboral que posibilita tener un empleo por cuenta propia a PCDID con dificultades de inserción laboral, de manera que puedan emprender iniciativas empresariales sostenibles y con los apoyos necesarios.

Lo primero que hizo Alberto fue comunicar a los preparadores laborales, José Jiménez y Arancha Cebrián, su inquietud por tener un negocio propio. A partir de ese momento se pusieron manos a la obra para ofrecerle todos los apoyos necesarios para hacerlo realidad.

Fases del emprendimiento con apoyo

El proceso empieza con la creación de un grupo de trabajo formado por Alberto, profesionales de ASPRONA y su familia. El objetivo es tener un conocimiento en profundidad para saber sus inquietudes laborales, sus potenciales y las necesidades de apoyo que tiene para iniciar el proceso de desarrollo de ideas y el posible modelo de negocio.

Tras la formación que Alberto hizo de emprendimiento, el segundo paso fue la idea de negocio. Se barajaron varias posibilidades relacionadas con el servicio a domicilio en general y finalmente se llegó a un acuerdo con Koiki, una franquicia nacional que es operador de transportes y que se dedica al reparto de paquetería sostenible a domicilio.

Esta empresa tiene acuerdos con las mayores empresas de reparto de mercancías a nivel nacional y a través de SEUR, Alberto recibe todos los días entre 30 o 40 paquetes para entregar a pie en comercios, domicilios y oficinas del centro de la ciudad, zona industria, Catedral, Villacerrada, Feria y alrededores.

Cada mañana, Alberto introduce en su PDA, los códigos de barras de cada paquete para que queden registrados. Después organiza y optimiza su ruta con la ayuda de su mapa.

Según nos ha dicho Alberto, este trabajo le gusta mucho y disfruta haciéndolo cada día, el estar en contacto con personas: “es muy satisfactorio y me gustaría seguir muchos años así”.

Este deseo no quita que se preocupe por su futuro y quiera asegurarse un puesto de trabajo, por eso en la actualidad a la vez de trabajar como repartidor por las mañanas, estudia por las tardes para una oposición de conserje de la Administración General del Estado. Algo en lo que tiene experiencia porque antes de ser repartidor, Alberto trabajó de conserje en la Diputación de Albacete y en el Ayuntamiento de Albacete.

En la actualidad el apoyo que los preparadores laborales ofrecen a Alberto es un seguimiento para ver que todo funciona de manera correcta y también ayudan a la coordinación con el grupo de apoyo que lo forman la familia, los preparadores laborales y Koiki. ASPRONA cede un pequeño espacio para la recepción de paquetes diarios.

En estos momentos, según han explicado los preparadores laborales de Capacitación, están inmersos en un momento de sensibilización tanto a las empresas como para las propias personas con discapacidad para que se vea el emprendimiento como una opción más de empleo para las personas con discapacidad intelectual.

Por último, añadir que la Fundación Once ha concedido a Alberto una ayuda para el emprendimiento de personas con discapacidad de 6.000 euros.

El servicio de Capacitación de ASPRONA atiende a 164 personas en la provincia de Albacete y ha firmado más de 20 nuevos convenios en el último año. Es un programa cofinanciado por el Fondo Social Europeo Plus en el marco del Programa operativo FSE+ 2021-2027 de Castilla-La Mancha.